DE LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN A LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO
La educación como mediadora.
Por: Marcela Benavides Sarmiento
Oscar Holguín Villamil
Los cambios estructurales que en el sector social, político, económico, laboral, educativo y de relaciones que Actualmente conforman y posibilitan una nueva realidad, así como la irrupción y desarrollo de las nuevas tecnologías están al servicio del día a día de los escenarios en los que el sujeto se desempeña . Se asume la emergencia, y la configuración de una forma particular de entender la cultura, que en no pocas ocasiones provoca desconfianzas en particular en el escenario de la construcción filosófica del horizonte de sentido que provoca el modelo de sociedad emergente. En esta coyuntura, la información aparece como el elemento clave, aglutinador, estructurador... de este tipo de sociedad.
En palabras de López Cerezo (2000), toda sociedad es posible de ser asumida como de conocimiento, pero el rasgo distintivo de la sociedad actual, atribuye sentido al quehacer histórico, en tanto las manifestaciones culturales son significativamente diferentes a los aconteceres de la sociedad industrial y por ello constituye su sucesión. Así, es posible ubicar los orígenes de la sociedad del conocimiento en la década de los setenta, dado que se comienza a hablar en ella, respecto de la "sociedad de la información".
Se abandera en esta época, la connotación de la información como la opción válida para acceder a las acciones de la cultura, por ello la ya apropiada socialmente frase de que "la información es poder" provocó toda una serie de cambios en las tres décadas pasadas y en las que en el entrado siglo XXI, constituyeron las razones que vendrían paralelamente a caracterizar por muy contradictorias que aparezcan, en los niveles internacional y nacional de los países tanto del primer, como del tercer mundo, las acciones académicas de reflexión cultural en el mundo; son estas razones el inicio de la esencia del poder de la información, a juicio de expertos economistas como Francis Fukuyama (1996), Jacobo Bronowsky o Peter Druker, marcadas por el cambio del paradigma científico y tecnológico que caracterizó la sociedad industrial en la perspectiva de la sociedad emergente que configura nuevas pautas sociales, motivadas por el auge del sector servicios.
Por otra parte el mundo ha entrado en un proceso cada vez más acelerado de inestabilidad y desigualdades económicas, de conflictos políticos y militares dentro y entre muchos países, con el crecimiento exponencial de la pobreza y el deterioro de la condición social de la población, mundo en el que estamos asistiendo al renacimiento de los momentos más inequitativos y de injusticia social de las sociedades hoy llamadas desarrolladas, tales como el racismo, la xenofobia, lo fundamentalismos religiosos, étnicos y nacionales y que se dieron en la sociedad industrial y post-industrial. Así, la sociedad emergente de la información y con la prospectiva de constituirse en conocimiento, se destinará a "producir" bienes ligados a la educación, la salud, la información, el medio ambiente, el ocio, etc. Y que configuran a grandes rasgos lo que se ha dado en llamar sociedad globalizada.
En la revisión histórica que se plantea, como aportes; más que de obnubilación por las dimensiones tecnológicas que provoca y que de señalamientos por la relación con la denominada sociedad neoliberal o globalizada, es necesario ver el hoy y el ahora, en la sociedad occidental en la cual estamos inmersos, dado que se nos brinda la información como un factor que se puede poseer, que es accesible, que da poder, que da conocimiento. El culto de la información es mas que la frase en líneas anteriores planteada, dado que en efecto, a decir de Humberto Eco, la comunicación como elemento que subyace al proceso de transformación de la información en conocimiento, pasa de ser un mito que otorga autoridad, ventajas, superioridad, dominio, a ser una posesión de todos los sectores de la sociedad, posesión que debe sin embargo, no ser considera como adquisición que ha de tener carácter informativo, por el simple hecho de ser poseída; o de poder ser asimilada por un sujeto. Se ha producido un cambio en el concepto de la información, se ha pasado a la interpretación social del concepto del conocimiento.
Es importante en estas reflexiones precisar que aunque las dimensiones y razones expuestas, en prácticamente todos los países están dadas, para hablar de la sociedad del conocimiento, en particular por la vinculación de las acciones educativas que en tiempo real y a través de las virtudes de la virtualidad, se han posibilitado y resultaría necio desconocerlas; también la certeza de que en sentido estricto todavía no existe una sociedad del conocimiento, sino que el concepto más bien se refiere a un modelo de sociedad que se encuentra en construcción, así como también lo está la sociedad que se plantea emergente y en esa emergencia el papel educativo supone, como para muchas otras condiciones de la cultura, un importante eje de articulación que desde el presente, se proyectan en la prospectiva social del país y su preparación para el tránsito a la sociedad del conocimiento.
EL PAPEL DE LA EDUCACIÓN
Plantear en la reflexión que nos convoca, una clasificación de acciones organizativas de la escuela, de las actividades y actitudes apropiadas por parte de los docentes, de las destrezas de los estudiantes frente a las nuevas tecnologías; resulta a todas luces una clara perspectiva reduccionista, en la que si se acompaña de una lista de chequeo, el maremágnum se completa en tanto convulsión que se inserta en la sociedad emergente del conocimiento y se distancia de la importancia de la perspectiva que subyace a la existencia contemporánea del estatuto epistemológico que la educación debe estar en condición de posibilitar.
¿Qué transformaciones requiere el sistema educativo del país?, ¿Qué supone la construcción de políticas públicas en ciencia, tecnología e innovación? ¿En qué se beneficia el país y cuáles son las ventajas de un tránsito a la sociedad del conocimiento?; son entre otras las interrogaciones que suscita en primera instancia el papel que podría aportar el proceso educativo y que como se ha manifestado, va mas allá de la perspectiva instrumental tecnofílica [-y se repite-] obnubilante en la que parte del sector social recae. Así, resulta importante aclararse en la comunidad académica del país, cuestiones como el valor del conocimiento, la construcción conceptual que se adopta alrededor de los conceptos de “sociedad de la información” y de “sociedad del conocimiento” y los de “cultura científica y tecnológica”, y la necesidad de identificar la riqueza y diversidad cultural al momento de diseñar las políticas de innovación, las de educación y las científicas del país. Por lo enunciado, es de considerar que a nuestro parecer es un error pensar que el tránsito hacia la sociedad del conocimiento significa únicamente orientar las prácticas de los docentes al manejo de prácticas cargadas de interacciones instrumentales que en la escuela suponen “superar la brecha” digital, y que adaptan la idea de generar estrategias de generación de conocimiento.
En virtud de lo enunciado es importante no reducir la idea de la sociedad del conocimiento a una sociedad que dispone ampliamente de tecnologías de la información y la comunicación, porque equivocadamente, la creencia hasta ahora presente se alimenta de este imaginario.
Por lo expresado y para concluir, es entonces requerimiento fundamental en el contexto de estas reflexiones provocadoras de la idea de tránsito entre las posibilidades del país de ir de la sociedad de la información a la sociedad del conocimiento; provocar con el sentido del deber ser, …[-que como se ha expresado, supera la idea de lista de chequeo, para incrustarse en la perspectiva de estatuto de reflexión teórica y de contexto-], de la sociedad emergente del conocimiento y en ese deber ser se recalca la importancia de que los diferentes grupos sociales del país, que supone la diversidad cultural, valoren el conocimiento adquirido por la fuente que corresponda y en el contexto apropiado, en función de los intereses, y más todavía que lo aprovechen para la solución de sus problemas. Igualmente es de enfatizar en la educación de personas, para personas, es decir el desarrollo humano y cultural que supone hallar las condiciones apropiadas, entre las cuales si existen las mediaciones tecnológicas, en particular de la comunicación, mejor; para que se genere el nuevo conocimiento que el país necesita y que le ha de permitir el desarrollo de sus capacidades para la solución de los problemas y su participación en el mundo globalizado.
BIBLIOGRAFÍA
Bronowsky, Jacobo. (1990). “El Ascenso del hombre”,
Fukuyama, Francis. (1996), “El fin de la Historia y el último Hombre”, Colombia segunda reimpresión. Editorial Planeta.
López Cerezo, José A. (2000), “Observaciones sobre los indicadores de impacto social”, en Revista Iberoamericana de Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación. OEI, num.3, mayo-agosto de 2000.
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ResponderEliminarJunto a la reflexión epistemológica sobre el significado de sociedad de la información o del conocimiento y sus implicaciones, hay que responder también con medidas urgentes desde lo práctico, por que el país sigue teniendo uno de los más bajos indicadores internacionales de calidad educativa, estos son niños, niñas y jóvenes de carne y hueso condenados a la exclusión y el fracaso, esto se expresa en inequidad y aumento de la brecha social ya no de la digital. Lo que llaman instrumentalismo reduccionista aqui, es una respuesta que todos los paises del mundo están dando como respuesta al cierre de brechas y creo que el planteamiento velado de que las TIC no son necesarias para superar los problemas del postmodernismo está sesgado. A que llaman lista de chequeo en este contexto? Hay unas formulas y unas propuestas de como debe ser la educación del S XXI de cara a los cambios que se suscitan por las transformaciones en la cultura, en la economía, en la geopolìtica, todas pasan por el uso de las TIC, eso es innegable, pero creo que se ha interpretado a lo Neil Postman con Tecnópolis el llamado que se hace a nuestros maestros a ponerse a tono, tanto en lo teórico como en lo didáctico con estas nuevas posibilidades.....
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